lunes, 29 de septiembre de 2014

Entresemana Oposición ¿responsable? Moisés Sánchez Limón


No es un secreto que la mejor arma política para enfrentar al enemigo es la división de éste; mejor cuando la dispersión doméstica se prohíja por ambiciones propias de sus integrantes. La izquierda es el mejor ejemplo de cómo se puede fracasar en el intento pese al trabajo y apoyo de millones de militantes.
Sin embargo, esta izquierda muy a la mexicana, la del Partido de la Revolución Democrática, hoy avanza con amplias posibilidades de convertirse en la segunda fuerza político-partidista del país. Se significa como alimento básico para esta democracia en permanente proceso de construcción.
En contraste, el Partido Acción Nacional, representativo de la derecha, se atomiza merced a las profundas diferencias que hay entre sus principales integrantes.
Lo que ocurre al interior del PAN, lejos de abonar a la unidad evidencia severos conflictos en la lucha por el control del partido. La ligereza declarativa de Jorge Luis Preciado Rodríguez, coordinador de los senadores de Acción Nacional, es un ejemplo.
Luego, la renuncia de Juan Ignacio Zavala Gómez del Campo, cuñado del ex presidente Felipe Calderón, a su militancia de más de dos décadas en el PAN, decisión que dice haber tomado sin consultar a nadie la semana pasada porque considera es momento de saberse retirar con agradecimiento y sin amargura, no es cualquier decisión.
Juan Ignacio fue uno de los activos del grupo que tejió la asunción del PAN a la Presidencia de la República. Ni más ni menos.
Eso lo presumió desde aquellos días que se desempeñó como director de Comunicación Social con el entonces procurador General de la República, Fernando Antonio Lozano Gracia, el diputado panista que pidió licencia a la curul para sumarse al gabinete de  Ernesto Zedillo, dizque con el fin de que las investigaciones de los casos Posadas Ocampo, Colosio y Ruiz Massieu se condujeran por vías apartadas de la influencia oficial y del PRI.
Para él carecía de importancia el trato con la prensa, es decir, con los reporteros que cubrían la fuente de la PGR. Y desde la oficina que ocupaba en las instalaciones de la Procuraduría, trabajaba en esa tarea política. El equipo al que pertenece cumplió el sueño de llegar a la Presidencia de la República, solo que su cuñado hizo todo lo posible para perderla después de seis años de errática administración.
Hoy, se antoja difícil que el PAN remonte la adversidad política y partidista en la que lo ha sumido la disputa por el poder. Felipe Calderón perdió la elección federal de 2012 y tuvo la genialidad de dividir a su partido, del que se refiere despectivamente.  Las tribus azules tienen un grave problema y éste se reflejará en las urnas en los comicios federales intermedios de junio de 2015.
En suma, Acción Nacional tiene problemas similares a los que el Partido de la Revolución Democrática debió superar en ese afán de sacudirse a la influencia ultra radical de Andrés Manuel López Obrador y aquellos que llegaron al poder para enriquecerse e incurrir en las mismas condiciones que criticaron al PRI, que se olvidaron de la doctrina de izquierda y asumieron liderazgos de tribus que se repartieron el poder y los dineros.
Difícil ha sido para el PRD esta tarea de dejar atrás y en el archivo lo que no se debe hacer. La sola presidencia de dos de sus miembros distinguidos en las Mesas Directivas del Senado, Miguel Barbosa Huerta, y de la Cámara de Diputados, Silvano Aureoles Conejo, serios aspirantes a los gobiernos de Puebla y de Michoacán, es muestra de que rinde frutos ser una oposición responsable. Pese a todo.
Por supuesto, tanto a Barbosa como a Aureoles la crítica de las alas radicales del perredismo y del mismo López Obrador, insiste en calificarlos entregados al gobierno de Enrique Peña Nieto. Lo evidente es que, sin dejar su postura crítica y decisiones cuestionables, su postura en torno de las reformas estructurales ha sido más de apoyo. Ir a contracorriente con la reforma energética es apenas elemental, porque ha sido su bandera desde el nacimiento del PRD.
En este clima, el próximo sábado 4 de octubre se celebrará la elección de la nueva dirigencia nacional del Partido de la Revolución Democrática. En total, 404 consejeros decidirán quién relevará en el cargo de presidente nacional a Jesús Zambrano Grijalva y a Alejandro Sánchez Camacho, en la secretaría general del partido.
La intervención del Instituto Nacional Electoral en la elección de los consejeros, fue un factor que posibilita la ausencia de conflictos en el PRD en este proceso de renovación de la dirigencia nacional.
Incluso el aún secretario general, Alejandro Sánchez Camacho, integrante de esa ala radical perredista a la que también pertenece la actual vicepresidenta de la Cámara de Diputados, Aleida Alavez, exhortó a los consejeros nacionales a que este proceso del próximo fin de semana “no se convierta en una catástrofe interna de nuestro partido, sino que se lleve a cabo un ambiente de competencia como ocurre en el PRD, pero sobretodo que haya gobernabilidad”.
Y es que, planteó Sánchez Camacho, “necesitamos un PRD que salga unido para las próximas tareas que estamos por efectuar, como es el tema de la consulta popular y las elecciones constitucionales del año 2015”. Difícil e impensable, pero las tribus perredistas se pusieron de acuerdo, mientras en el PAN los desencuentros alimentan la dispersión. ¿Oposición responsable? Digo.
LUNES. Con la representación del presidente Enrique Peña Nieto, el secretario de Comunicaciones y Transportes, Gerardo Ruiz Esparza, acudirá mañana martes a la ceremonia conmemorativa del CCXLIX aniversario del natalicio de José María Morelos, el “Siervo de la Nación”.
En el municipio de Ecatepec, en la Casa de Morelos, Ruiz Esparza depositará una ofrenda floral y montará una guardia de honor acompañado por el gobernador del Estado de México, Eruviel Ávila Villegas, los senadores Ana Lilia Herrera Anzaldo, Armando Neyra Chávez, Alejandro Encinas y diputados federales y locales, además de funcionarios del gobierno estatal, entre otros invitados.
Ruiz Esparza será el orador oficial del Gobierno de la República en el acto con el que se recordará al autor de los “Sentimientos de la Nación”, documento considerado como uno de los textos políticos más importantes de la historia del país. Conste.
@msanchezlimon